MONICIÓN INCIAL (1)
Celebramos hoy la vigilia de la Solemnidad de los apóstoles san Pedro y san Pablo:
– el pescador de Galilea, que fue el primero en confesar la fe en Cristo;
– y el maestro y doctor, que anunció la salvación a los gentiles.
Por voluntad de la divina Providencia, ambos llegaron a Roma, donde sufrieron el martirio en el lapso de pocos años.
Desde entonces la ciudad de Roma, que era la capital de un gran imperio, fue llamada a otra gloria: albergar la Sede Apostólica, que preside la misión universal de la Iglesia de difundir por el mundo el Evangelio de Cristo, Redentor del hombre y de la historia.
Pidamos en este día por nuestro Santo Padre, el papa Francisco, para que el Señor proteja e ilumine en su tarea de guiar a la Iglesia, como sucesor de Pedro
MONICIÓN INCIAL (2)
Celebramos hoy la Solemnidad de san Pedro y san Pablo, Apóstoles, elegidos por Cristo para ser columnas de la Iglesia y heraldos del Evangelio de Dios.
– Pablo: celoso observante de la Ley de Moisés, convertido a Cristo en el camino de Damasco.
– Simón Pedro: pescador de Galilea, elegido por el Señor para ser la «piedra» visible y el fundamento de la unidad de la Iglesia.
Dos personas ordinarias transformadas en personas extraordinarias por la gracia de Dios.
Que los ejemplos de fe y santidad de estos hermanos nuestros y el testimonio de su vida entregada por Cristo y por proclamar su Palabra, nos animen a dar nuevos pasos adelante en nuestra vida cristiana de cada día.
ORACIÓN UNIVERSAL
Invocando la intercesión de los santos Apóstoles Pedro y Pablo, maestros en la fe y columnas de la Iglesia, elevemos nuestra súplica a Dios Padre Omnipotente.
A cada petición diremos: ¡Escúchanos, Padre!
1. Por la santa Iglesia de Dios, la Esposa del Cordero. Para que confiese con valentía y gozo la fe en el Señor y sea para todos los hombres faro luminoso que orienta en las tempestades de la vida. OREMOS.
2. Por nuestro Papa Francisco, el sucesor del Apóstol Pedro. Para que sea sostenido y fortalecido en su misión de guiar a los discípulos de Cristo en la verdad de la fe. OREMOS.
3. Por todas las naciones de la tierra. Para que los corazones de los hombres se conviertan al bien y al perdón y los pueblos desgarrados por las guerras fratricidas y por el terrorismo conozcan un tiempo de justicia y de paz. OREMOS.
4. Por nosotros aquí reunidos y por nuestra Comunidad. Para que conservemos la fe que nos enseñaron Pedro y Pablo, y la sepamos transmitir a las nuevas generaciones con fidelidad. OREMOS.
Padre Santo, por intercesión de los santos Pedro y Pablo, concédenos estar abiertos a tu Evangelio, para que no haya sombra, por más densa que sea, que pueda oscurecer en nosotros la luz de Cristo. Que vive y reina por los siglos de los siglos. Amén.
gracias por esta ayuda tan buena
Para la mayor gloria de Dios!