MONICIÓN INICIAL
La Liturgia de hoy hablará sobre el perdón. Como comentando las palabras del Padrenuestro: «perdona nuestras ofensas, como también nosotros perdonamos a los que nos ofenden».
Preguntémonos —que cada uno se pregunte en su corazón— si he perdonado de veras.
Si sé perdonar.
Si estoy dispuesto a perdonar.
Hasta dónde cargo en mí heridas —sufrimiento— causado por otros, todavía no sanado, todavía no cerrado.
Quizá yo mismo tengo que pedir perdón.
Así como ahora pedimos perdón a Dios vivo. Que conoce mi corazón y puede transformarlo.
Querido monitor/a: Los puntos (.) se entonan hacia abajo. SIEMPRE.